¡ Bienvenidos a la 527 !

Para los niños trabajamos, porque los niños son los
que saben querer, porque los niños son la esperanza del mundo.




martes, 28 de septiembre de 2010

martes, 21 de septiembre de 2010

Si quieren ver las fotos del día del  los Cuentos entren a:
http://cuentacuentos.dattatec.com/escuela-abanderado-grandoli-rosario-argentina-670
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Están muy lindas!!!!!!!!!!!!!!!

sábado, 18 de septiembre de 2010

AQUI ALGUNAS FOTOS DE TEMAIKÉN 2009

2ª Y 3ª EN TEMAIKÉN AÑO 2009 ESTUVO GENIAL

El año pasado la pasamos genial,  fuimos 2 y 3 grado, se nos cumplió el sueño de ir a Temaikén.
 Los niños han disfrutado al más no poder, las caritas de asombro  eran impagables.
Docentes que fueron: Marina Firpo, Analía Franchi, Myriam Otero y Ma. Inés Gayarré, es ese momento la Directora.

jueves, 16 de septiembre de 2010

VISITAMOS EL CONCEJO MUNICIPAL DE ROSARIO

 
Los alumnos y los docentes de 6to y 7mo grado del turno mañana de nuestra escuela visitamos el Concejo y nos informamos acerca de quiénes y cómo trabajan nuestros concejales.


lunes, 30 de agosto de 2010

¿QUIÉN FUE EL ABANDERADO GRANDOLI?


MARIANO GRANDOLI
Nació en el Rosario de Santa Fe, el 26 de abril de 1849, siendo bautizado en la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario, el día 30 del mismo mes por el cura Miguel Obón, con los nombres de Cleto Mariano; siendo padrinos de la ceremonia, Domingo Correa y Laureana Correa (Libro 8º de Bautismos al folio 277).  Era hijo legítimo del matrimonio de Mariano Grandoli con Magdalena Correa.

Se educaba en su ciudad natal cuando el mariscal Solano López atacó los buques de guerra argentinos “Gualeguay” y “25 de Mayo”, apoderándose de la ciudad de Corrientes e invadiendo el territorio de esta provincia; el joven Grandoli se ofreció al Ejército en julio de 1865, siendo dado de alta como subteniente abanderado del Batallón Santafecino, cuerpo con el que inmediatamente marchó a incorporarse al ejército de operaciones, verificándolo en el Ayuí Chico, en el curso del mismo mes.

Participó en la batalla de Yatay y a la toma de Uruguayana, y por méritos de guerra, en octubre de dicho año ascendió a subteniente 1º de bandera de su batallón.  Permaneció en el campamento de las Ensenaditas, de enero a abril de 1866, y se encontró en el pasaje del ejército aliado por el Paso de la Patria, el 16 de este último mes y en la toma de la batería de Itapirú, al día siguiente.  Participó en el rechazo de los paraguayos en el Estero Bellaco del Sud, el 2 de mayo, y en la acción librada el día 20 para cruzar el mismo estero. 

Fue uno de los que combatieron en la tremenda batalla de Tuyutí, el 24 de mayo.  Las unidades rosarinas se destacan brillantemente.  El “1ro de Santa Fe” y el “Rosario” se cubren de gloria, y sus banderas, sostenidas por los jóvenes abanderados Grandoli y Anaya, flamean en medio del combate, en tanto que las balas las acribillan poniendo en serio peligro a los que las llevan.  El Coronel Avalos, cuyo Cuerpo perdiera ochenta y dos hombres, felicita al portaestandarte que demostrara no temer a la muerte en esa horrible batalla que fuera considerada por los más destacados especialistas en temas castrenses, la más grande y sangrienta de América del Sur.  Grandoli fue acreedor al escudo de plata acordado por ley del Congreso posteriormente.

Tomó parte en las operaciones de Yataytí-Corá, en julio de 1866, y en Boquerón y Sauce.  En vísperas del terrible asalto de Curupaytí, Grandoli, al contemplar las imponentes defensas, escribió a su madre: “El argentino de honor debe dejar de existir antes de ver humillada la bandera de la Patria.  Yo no dudo que la vida militar es penosa, pero, ¿qué importa si uno padece defendiendo los derechos y la honra de su país?  Mañana seremos diezmados, pero yo he de saber morir defendiendo la bandera que me dieron”.

Y el Héroe cumplió gloriosamente su promesa, cayendo atravesado por 14 balazos el emblema que conducía Grandoli, y manchado con la sangre de éste, que cayó al pie de las trincheras paraguayas de Curupaytí, en la inmortal jornada del 22 de setiembre de 1866.

La enseña manchada con la sangre del glorioso abanderado, está actualmente en el Museo Histórico Provincial Dr. Julio Marc, de Rosario, Pcia. de Santa Fe.  En una placa de bronce, se transcribe la carta que el coronel Avalos le dirigió días más tarde a un vecino de Rosario: “Hecha pedazos como está y manchada con la sangre del intrépido subteniente 1ro de bandera don Mariano Grandoli, tal vez no la conozcan más las distinguidas señoritas que la trabajaron…”, y concluía pidiendo que les dijera: “No se olviden de los que quedaron en Curupaytí, que tal vez ellos ese día recordaban de ellas por el tanto arrojo que hubo”.

El 13 de junio de 1872, el antiguo jefe de la 3ª División del 1er Cuerpo del Ejército Argentino, a la que pertenecía el Batallón 1º Santa Fe, coronel José Ramón Esquivel, extendió en la ciudad del Rosario, una certificación de los gloriosos servicios prestados por el abanderado Mariano Grandoli, en su corta, pero admirable carrera militar.

Los restos de Grandoli no pudieron ser rescatados y quedaron en la trinchera, como los de tantos argentinos.

Fuente
De Marco, Miguel Angel – Banderas rosarinas en la Guerra del Paraguay, (1960).
Turone, Oscar A. – Efemérides – Patricios de Vuelta de Obligado.
Yaben, Jacinto R. – Biografías argentinas y sudamericanas – Buenos Aires (1939).

martes, 24 de agosto de 2010

¡ QUE VIVAN LOS NIÑOS!

DERECHOS DE LOS NIÑOS

La educación de los niños en sus derechos es un instrumento indispensable para iniciar y promover la paz, la democracia y la valoración de los derechos humanos.
El 20 de noviembre de 1959 fue firmada por la organización de las Naciones Unidas la Declaración de los Derechos del Niño. La familia y la escuela deben promover y apoyar el derecho de los niños a conocer los derechos que allí se reafirmaron.